by Kassandra Manriquez
To keep the Ronstadt or do away with it, to keep bus fares affordable or butcher the budgets of Tucson’s poorest …
On Sunday October 6, over 300 community members sat in front of several City Council members at Sacred Heart Parish who were present to discuss JobPath, Sun Tran bus fares, and the development of Ronstadt Transit Center. This discourse took place in the context of poverty.
Community members sat in wooden pews and listened to City Council members discuss community issues; we cheered, we nodded our heads in disapproval, blah blah blah.
However, the most powerful portion of the session was when members from our community stood up and shared their stories. They defended issues on the agenda that are important to them and crucial to their success and for some, their survival.
Casa Maria volunteers, Maria Escalante and her daughter Cindy broke down their monthly budget in front of 300 people, most of whom were strangers to them. Maria and Cindy’s courage is admirable. Listening to their monthly budget, one could easily gather that an increase in bus fares would corner this family into facing a major economic struggle. I would like to add that Maria does not receive any government assistance.
Councilwoman Karin Uhlich addressed Maria’s concern, “[A solution to poverty is] To make sure that any person who is willing to work hard and ready to commit to a job can get into that job. But what does that mean? It does mean a strong transit system. Families not only save so much money by not having to have a car but they need a good system and Sun Tran is now rated number four in the country for helping people to connect to jobs.” Ultimately, Uhlich said she will vote against an increase in bus fares.
Tucson is the sixth poorest city in the country. It is a matter of survival for so many people. And to be very real with you, living here at the University of Arizona, as I meditate on whether or not I want to splurge on a $6 cup of coffee, I forget that there are bigger issues facing families who live just five minutes south of me. For these people, they meditate daily on whether they’re feeding their family tonight or paying for a bus pass to send their children to school.
traducción por Jimmy Ojeda
Mantener Ronstadt o eliminarlo, mantener las tarifas o despedazar el presupuesto de los más pobres de Tucson…
El domingo 6 de octubre, más de 300 miembros de la comunidad se sentaron en frente de varios miembros del Concilio de la Ciudad en la Iglesia Sagrado Corazón, quienes estuvieron presentes para dialogar sobre JobPath, las tarifas de los camiones, y el desarrollo de Centro de Transporte Ronstadt. Este evento se llevo a cabo dentro del contexto de la pobreza.
Los miembros de la comunidad se sentaron en las bancas de la iglesia y escucharon a los miembros del Concilio de la Ciudad dialogar sobre temas de la comunidad; nosotros echamos porras, movimos nuestras cabeza en acuerdo o desacuerdo, blah blah blah.
Sin embargo, la parte más fuerte de la sesión fue cuando miembros de nuestra comunidad se pararon y compartieron sus historias. Ellos defendieron temas en la agenda importantes para ellos y cruciales para sus éxitos y para algunos, su sobrevivencia.
María Escalante y su hija Cindy, voluntarias de Casa María, explicaron su presupuesto mensual en frente de más de 300 personas, la mayoría de las cuales eran personas extrañas a ellas. El valor que mostraron María y Cindy es admirable. Al escuchar su presupuesto mensual, uno fácilmente puede darse cuenta de que un incremento en las tarifas de los camiones arrinconaría a esta familia a tener que enfrentar grandes dificultades económicas. Quisiera agregar que María no recibe ninguna ayuda del gobierno.
Karin Uhlich, miembro del Concilio respondió a la preocupación de María, “[Una solución a la pobreza es] Asegurarse de que cualquier persona que está dispuesta a trabajar duro y comprometerse a un trabajo, pueda obtener un trabajo. ¿Pero qué significa esto? Esto significa tener un buen sistema de transporte. Las familias no solo ahorran dinero al no tener que tener un carro pero necesitan un buen sistema y Sun Tran es ahora considerado número cuatro en el país en ayudar a conectar a las personas a trabajos.” Finalmente, Uhlich dijo que ella votaría en contra de incrementar las tarifas de los camiones.
Tucson es la sexta ciudad más pobre en el país. Muchas personas están tratando de sobrevivir. Para ser real con ustedes, viviendo aquí en la Universidad de Arizona, mi decisión es entre comprar o no una taza de café de $6 dólares, me olvido de que hay problemas más grandes que enfrentan las familias que viven a solo cinco minutos al sur de mi. Para estas personas, ellos tienen que meditar diariamente si van a dar de comer a sus hijos esta noche, o si van a pagar para un pase del camión para enviar a sus hijos a la escuela.